El bautizo yoruba era hasta hace algunos años muy poco conocido en Occidente, solo algunas casas religiosas conservaban porciones de dicha ceremonia adaptadas a la santería cubana. Con la aparición del neo-tradicionalismo y el ferviente deseo de muchos Babalawos de encontrarse con sus raíces religiosas esta situación cambia y si bien no es tan común el desarrollo del Esèntáyé como de una entrega de Mano de Orunla su importancia es crucial para el buen desempeño de un recién nacido.
La traducción más aceptada de esta eficaz protección para niños es "Poner los pies en la tierra al re-encarnar" y es la ceremonia que permite que se le de un nombre adecuado a un bebé.
El Ìkosèdáyé tradicional es una ceremonia de protección espiritual para bebés, pero que evidentemente no es su única función dentro del mundo religioso yoruba. La ceremonia para el nombramiento yoruba la podemos dividir en 3 partes esenciales:
La elección de un nombre para un recién nacido es esencial, es el estandarte que siempre portará, la marca del legado de sus progenitores. Un mal nombre será tan poco cercano al triunfo como un destino mal escogido.
La filosofía yoruba establece que los difuntos familiares tienden a re-aparecer en el cuerpo físico de los recién nacidos. Para los yorubas no solo es importante que alguien nazca y sea cuidado adecuadamente sino que además se convierte en doble motivo de alegria al conocer que alguien de nuestra familia vuelve a estar en este mundo.
Durante la ceremonia de bautizmo yoruba se debe indagar mediante Ifá las características del viaje astral que acaba de realizar el alma re-encarnada del recién nacido, su objetivo en esta nueva vida, etc
Poniendo nombre a un niño yoruba, un poco más complejo de lo que parece
Durante dicha ceremonia el bebé recibe de 1 a 3 nombres yorubas, cada uno de ellos tiene un significado:
Es común la equivocación de pensar que las ilà, esas marcas rituales yorubas que se realizan en el rostro se efectúan también en dicha ceremonia, lo cual es incorrecto, lo más ampliamente aceptado es que en dependencia del linaje de la persona, su nombre y otros elementos se realicen dichas marcas faciales que terminan siendo escarificaciones, incisiones practicadas en la piel del rostro, pero eso se realiza en una ceremonia posterior . Es una seña de identidad de todos los yorubas africanos. Es fácil por dichas marcas faciales reconocer de dónde proviene una persona.
¿Quiere saber como proteger un bebé? De los malos ojos, de las envidias, de las malas elecciones. Déle entonces a esa pequeña alma llegada a la tierra la posibilidad de conocer su destino en este mundo, déle la oportunidad de saber cómo mejorar su vida y evitar riesgos innecesarios: Hágale Esentayé a su hijo, será para siempre próspero.